- Salvador Rangel intentó pacificar a grupos delictivos en Guerrero y en febrero denunció que recibió amenazas.
Alejandra Pérez Molina
El obispo Salvador Rangel Mendoza fue reportado como desaparecido; intentó pacificar Guerrero, al reunirse con ‘Los Tlacos’ y ‘Los Ardillos’, y en febrero denunció que recibió amenazas.
Se le vio por última vez el sábado, a fuera de su casa en Jiutepec, Morelos.
En entrevista con Carlos Loret de Mola, el obispo señaló que el Gobierno Estatal “cobijado con el federal, o tienen miedo de actuar contra los narcotraficantes o están coludidos”.
Y afirmó que las amenazas llegaron porque, “se han molestado conmigo las autoridades por declaraciones que he hecho”.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) confirmó la desaparición del obispo.
“La Conferencia del Episcopado Mexicano informa con profunda consternación sobre la desaparición de Monseñor Salvador Rangel Mendoza, Obispo Emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Guerrero, de quien se desconoce su paradero desde el día 27 de abril”.